15 abr 2010

Pocas Horas


Mientras espero un fuego lento consume mis huesos,
y pregunto donde estas, te maldigo y vuelvo a llorar,
tibio aliento de la muerte, robustece mi tormento,
espero mientras veo lo que te quema por dentro.

Un suave rocío moja mi alma, un miedo eterno,
mi alma se escapa y te resguarda,
un fuego, mas que un verso, un segundo eterno,
no lo deseo, no lo veo, no te deseo.

Las lagrimas evocan un heroísmo fundido,
las garras del león destruyen mi paraíso,
te pido por mis días, y por un flor perdida,
te miro, no lo permitas.......

1 comentario:

Anónimo dijo...

un lugar de piedra y silencio